Con más de 8 millones de habitantes, Bogotá es la ciudad con mayor población en Colombia. Sin embargo, esto no siempre fue así. Pues hace unos 70 años atrás, la capital del país era más pequeña y no tenía el área con el que cuenta en estos tiempos. De hecho, localidades emblemáticas como Usaquén y Suba solo eran pueblos que quedaban a las afueras de la capital.
Actualmente, Usaquén y Suba son dos de las 20 localidades de Bogotá. Sin embargo, en la década de los 40, estas zonas solo eran dos municipios rurales aledaños a la ciudad y no hacían parte del área de la capital del país.
Según la alcaldía de Usaquén, esta zona fue anexada a Bogotá el 17 de diciembre de 1954. En aquel entonces, dicha zona dejó de ser un municipio de Cundinamarca y pasó a ser una localidad. En 1972, se convirtió en una de las nacientes alcaldías locales del Distrito Especial de Bogotá.
Por su parte, antes de 1950, Suba era un territorio habitado principalmente por los indígenas Muiscas, quienes establecieron sus viviendas cerca de la laguna de Tibabuyes para practicar rituales ancestrales con el agua. Sin embargo, tras la llegada de los conquistadores, estas tradiciones se perdieron. En 1954, Suba se convirtió en una localidad de Bogotá y dejó de ser un municipio aledaño a la capital del país.
¿Cómo se veían Usaquén y Suba antes?
Usaquén
Antes de 1954, Usaquén era un municipio más del país en el que vivían los muiscas. Su nombre tiene varias interpretaciones. En la cultura muisca, hacía referencia a un título honorífico que significaba distinción y nobleza. Asimismo, la palabra proviene de «Usacá», nombre de la hija del cacique Tisquesusa, que se casó con el capitán español José María Cortés y recibió como dote estás tierras.
Antes de ser anexada a Bogotá, Usaquén era un municipio independiente que se caracterizaba por tener extensas zonas verdes, con haciendas, potreros y cultivos. La agricultura era la principal actividad económica, y el paisaje estaba marcado por la presencia de ríos, quebradas y humedales.
Por otro lado, el pueblo de Usaquén conservaba una arquitectura colonial típica, con casas de bahareque y teja, calles empedradas y plazas centrales. La iglesia de San Francisco de Usaquén, construida en el siglo XVII, era el principal referente arquitectónico.
Antes la Conquista, Suba era un territorio habitado principalmente por los indígenas Muiscas. Asimismo, era un pueblo rodeado de extensas zonas verdes y el paisaje estaba marcado por ríos, quebradas y humedales.
En 1950 fue la fundación oficial de Suba, llevada a cabo por Antonio Díaz Cardoso y Hernán Camilo Monsilva, quienes establecieron instituciones españolas en la zona. En 1875, este territorio también era habitado por terratenientes y campesinos.
Carrera 7 calle 119 #Usaquén al fondo la cúpula de la iglesia década del 1960
Contracara histórico-espacial de aquellas periferias originarias en las que se reflejaba la sociabilidad de las territorialidades rurales de Bogota: Hacienda en 1940 UPZNiza de Suba. pic.twitter.com/t5vsZB5Cb0
— MANUEL ENRIQUE PÉREZ MARTÍNEZ (@MPEREZRURURBAN) May 18, 2019
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