
Cada vez que se estrena una película de DiCaprio, todos voltean a ver qué es lo nuevo que hizo el ganador del Oscar, y más cuando está acompañado de un cast tan pesado como el que trae esta película llamada ‘Una Batalla, Tras Otra’.
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Leonardo Dicaprio, Sean Penn, Benicio del Toro, Regina Hall, Teyana Taylor y Chase Infiniti, se unen para contar esta historia que básicamente habla de la migración, la migración desbordada que mantiene a un montón de personas encerradas en ‘Centros de Detención’ bajo malos tratos o condiciones.
Aquí Leonardo encarna a Bob, un revolucionario que junto a su pareja buscan libertad e igualdad para los migrantes, juntos hacen parte de un grupo marcado como guerrillero que sabotea a los diferentes Centros de Detención. En muchas de esas “misiones” salen ganadores, hasta que se encuentran con el que será su némesis en todo el filme, Sean Penn, un militar que al ser víctima de los ataques de este grupo guerrillero se propone perseguirlos hasta capturarlos.
Y es aquí donde la cosa empieza a torcerse, pues la pareja de Dicaprio (Bob) queda en embarazo, por lo que él decide dar pasos atrás y alejarse de la vida arriesgada de la “revolución”. Todo eso mientras que su compañera Perfidia, quiere mantenerse en la lucha, eso termina distanciándolos.
Lo más grave llega cuando Perfidia en su revolución termina asesinando a un miembro de la seguridad de un banco, allí la policía la captura y la obliga a colaborar con la justicia entregando a todo su grupo guerrillero, y ella, lo hace.
Los únicos cabos sueltos son Dicaprio y su ahora hija Willa, quienes tendrán que buscar ayuda de su buen amigo Sergio (Benicio del Toro) para poder escapar y salir con vida, siendo ella una adolescente rebelde y él un psicótico sumergido en el cannabis.
Lo más denso de la historia, lo que más incomoda, es un grupo de personajes que se hacen llamar algo así como “El Club de los Aventureros Navideños”, narcisistas, racistas y violentos; estos tipos que parecen sacados de South Park por su nivel de crudeza. Ellos generan preocupación al dejarnos en la mente que a lo mejor sí existen personas así en el mundo real, pero para la película, es mejor pensar en que son personajes parodiados y exagerados.
Toda esta mezcla de pintorescos personajes en una historia que trata una problemática real actual como la migración, hace que simplemente no despeguemos ni un segundo los ojos de la gran pantalla. En resumen, otra gran película para Dicaprio y todo su combo dirigidos por Paul Thomas Anderson.
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La tensión, el enojo, la acción, y hasta los momentos de humor son tan bien logrados que hacen que esta película tenga que ser vista en cine, es la mejor manera de disfrutar una gran historia que traen de nuevo las ganas de llegar con balde de crispetas a sentarse en una sala con pantalla gigante.