Después de saltar 6,21 metros, la nigeriana Blessing Okagbare sufrió una penosa escena cuando cayó sobre la arena y al mismo tiempo su peluca cayó al piso.
Sin embargo, a pesar del percance, la atleta se puso de pie, recogió la peluca y con total tranquilidad volvió a lucirla sin problema alguno. De hecho estaba más preocupada por la marca registrada de su salto que por la peluca.