Sus vecinos Ian y Susan Nicholls se presentaron ante la Corte de Magistrados de Teesside, para informar que han tenido que soportar el ruido constante proveniente de la casa de Walker.
"Fue todo una pesadilla, siempre gritando, maldiciendo, teniendo que escuchar sus relaciones sexuales, todo ese tipo de cosas. No fue muy divertido", aseguró el señor Nicholls.
La Concejal de Middlesbrough, Katharine Metcalfe agregó que la pareja no había podido relajarse en su propia casa y que había sufrido de estrés y noches sin dormir.
"Este tipo de comportamiento es totalmente inaceptable y este caso demuestra que no dudaremos en tomar medidas para proteger a las comunidades de este tipo de molestias", concluyó el Concejal Charlie Rooney.