Los conductores que iban detrás intentaron esquivarlo, sin éxito, y los vehículos terminaron unos contra otros.
Diez personas fueron trasladadas al hospital sin que ninguna resultara con heridas graves. En cambio, ocho Ferraris y un Lamborghini, por el valor de varios cientos de miles de dólares cada uno, resultaron dañados.
El diario deportivo Sports Nippon, que detalla que entre los vehículos implicados también hubo tres Mercedes, calcula los daños totales en unos US$ 3,8 millones.
Los conductores, un grupo de aficionados a los coches de lujo, viajaban en grupo desde Kyushu (sur del país) hasta la ciudad de Hiroshima (oeste).
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