Led Zeppelin, Los Ramones y AC-DC ya tienen replica femenina

Laura Moreno

Una nueva generación de aficionadas al rock duro ha plagado la escena musical estadounidense de bandas que son replicas femeninas de famosos grupos masculinos, como es el caso de Las Ramonas, AC-DShe o Lez Zepellin.

Esas bandas, conocidas en ese país como ’’all-female tribute bands’’, no se limitan a tocar las canciones de sus interpretes preferidos, sino que cuentan con identidad propia: son jóvenes, guerreras y dispuestas a comerse la escena.

Como afirman las AC/DShe en su web: ’’si quieres problemas, dirígete a nosotras, y si buscas satisfacción, te la garantizamos’’.

Visten y actúan como sus idolatrados músicos, pero tocan sus canciones con una pasión que no tiene nada que envidiar: ’’cuando estamos en el escenario nos convertimos en AC/DC’’, aseguró a la revista Spin la líder y vocalista de AC/DShe, Bonny Scott.

Aparte de su nombre, un aspecto que destaca en estas formaciones es su decidida e intencionada ambigüedad sexual, que se ha convertido en uno de sus mejores elementos de promoción.

’’Nuestra orientación sexual preferimos mantenerla en secreto, ya que en el fondo no importa, lo que importa es la música’’, dice Steph Paynes, guitarrista de Lez Zeppelin, otro de estos grupos.

Su forma de actuar y presentarse deja abiertas las especulaciones sobre de su sexualidad, más aún si se tiene en cuenta que gozan de una notable popularidad entre el público gay y lésbico.

En el caso del grupo de Paynes, el ’’Lez’’ del nombre de la banda es un término despectivo con el que en Estados Unidos se alude a las lesbianas.

’’Es cierto que nos siguen numerosos gays y lesbianas, pero nuestro principal público son los verdaderos fans de Led Zeppelin, de todas las edades’’, asegura la guitarrista.

La participación de estos grupos en actos y festivales gays, como el concierto que dio Lez Zeppelin en Nueva York el pasado mes de enero con motivo de la fiesta de la telenovela de temática lésbica ’’The L World’’, ayuda a añadir morbo al fenómeno.

El movimiento

El nacimiento del movimiento se remonta a fines de los años noventa, cuando en San Francisco, California, cinco chicas pensaron en hacer una banda, AC/DShe, para rendir homenaje a los cáusticos AC/DC.

’’Fuimos la primera banda de tributo compuesta solo por chicas, y el que diga lo contrario está mintiendo’’, asegura Amy Ward, fundadora de AC/DShe, que tomo como apodo ’’Bonny Scott’’ en honor al primer cantante de los AC/DC.

La mayoría de estas nuevas rockeras no había nacido o apenas caminaba cuando sus homónimos masculinos llenaban estadios en los años 70 y primeros 80 al ritmo de ’’Jailbreak’’, de AC-DC, ’’Starway to Heaven’’, de Led Zeppelin, o’’Blitzkrieg Bop’’, de los Ramones.

Un caso especial es precisamente el de la homólogas de este ultimo grupo, The Ramonas, que no cuentan con una formación fija sino que sus doce componentes se van alternando en las giras para compaginar esa experiencia con su participación en otras bandas.

Según su líder y fundadora, Claire Ramona, ’’copiar el look es bastante fácil, así que nosotras lo que hacemos es cogerlo y darle un toque más sexy; somos como Los Ramones pero en versión femenina’’.

Lez Zeppelin, AC-DShe y Las Ramonas solo son la punta del iceberg del movimiento.

Aunque menos conocidas, también han surgido replicas femeninas de Iron Maiden, Montley Crue y Kiss, cuyos alter ego se llaman L.A.’s Iron Maiden, Live Wire y Black Diamond, estas ultimas tan cargadas de maquillaje y cuero como los colegas masculinos.

Las ’’all-female tribute bands’’ son por el momento un fenómeno perteneciente a la escena ’’underground’’ estadounidense, aunque ha comenzado a dar el salto al resto del mundo, como demuestran las Kissex, un grupo de italianas que rinden también culto a Kiss

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Tomado de https://www.lasegunda.com