Cerca de dos millones de personas vieron el concierto gratuito de los Rolling Stones en Río de Janerio

Laura Moreno

«El grupo de rock más famoso del mundo en la playa más famosa del mundo». Así describió la prensa el concierto gratuito que la veterana banda The Rolling Stones ofreció el sábado a casi dos millones de fanáticos que llegaron hasta Copabacana, en Río de Janeiro, Brasil. La banda ofreció un recital de dos horas como parte de su gira mundial Bigger Bang.

Mick Jagger y sus compañeros Keith Richards, Charlie Watts y Ron llegaron accedieron al escenario a través de un puente construido especialmente para el show y que llevaba a los Stones directamente a su hotel.

Al son de Jumping Jack Flash, el cuarteto dio inicio a su presentación, que estuvo marcada por el carisma de Jagger, quien tiene un hijo brasileño de 6 años con la modelo y animadora de TV local Luciana Giménez. El vocalista, en su mejor portugués agradeció y dijo frases como «Copacabana, esta es la mejor fiesta del mundo» y «Es bueno estar aquí de nuevo». El concierto finalizó con su clásica canción Satifaction, mientras 10 mil policías resguardaban la seguridad, apoyados por helicópteros que sobrevolaban la playa y las decenas de embarcaciones miraban el show desde el mar. Pese a la magnitud de público no hubo muertos, sólo 12 detenidos por robo, tres personas heridas con arma blanca, 28 rescatados del mar (mientras nadaban hacia el sector Vip), un parto y 700 espectadores atendidos por cosas menores. Tras Brasil, la banda iba a Buenos Aires.

Tomado de latercera.cl