Estoy muy contento con su progreso. Pienso que éste es un excelente primer paso en el camino de la recuperación», dijo el juez del Tribunal Superior, Rand Rubin a Love después de leer un informe sobre su tratamiento.
La cantante de 41 años, que llegó al tribunal con el libro Chronicles de Dylan y usando gafas oscuras, no fue autorizada a dejar la clínica de rehabilitación y podrá salir sólo en caso de emergencia. Además se someterá a controles de drogas al azar.
Rubin le ordenó a la cantante que regrese al tribunal el 18 de noviembre y amplió su libertad condicional, hasta marzo de 2007. «Muchas gracias», dijo Love calmada antes de abandonar el tribunal con un séquito de ocho personas. Su hija, Frances Bean Cobain, de 13 años e hija del legendario rockero Kurt Cobain, no estuvo presente.
En agosto, la ex vocalista de la banda Hole tuvo que ser llevada en ambulancia a un hospital desde el hotel Roosevelt de Hollywood. En ese momento, los representantes de Love dijeron que simplemente se había sentido indispuesta, pero responsables de la ciudad dijeron que habían respondido a un llamado por sobredosis. La policía dijo que un informe fue llevado aquella noche bajo el nombre de «Courtney L.».
En los papeles del tribunal, los fiscales dijeron sólo que la cantante estuvo bajo la influencia de una «sustancia controlada». Pero la fiscal del distrito adjunta, Gina Satriano, aseguró a periodistas que la alegación tenía que ver «con algún tipo de narcóticos».
El abogado de Love, Howard Weitzman, reconoció a los periodistas que su cliente había sufrido una «recaída» pero que está decidida a «seguir adelante» con su recuperación.
Tomado de 40 Principales España.
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