Seguidores de Foo Fighters logran que la gira pase por su ciudad

La campaña Crowdtilt Open fue lanzada en marzo por Andrew Goldin, un director creativo y copywriter autónomo que quería traer a la banda a su ciudad por primera vez desde 1998. Goldin y sus compañeros, Brig White, John McAdorey y Lucas Krost se pusieron como meta vender 1400 entradas a 50$ por el hipotético concierto para convencer a la banda. Solo se cobrarían el dinero de las tarjetas de crédito ingresadas si las entradas se agotaban, y las contribuciones se devolverían en su totalidad si la banda no aceptaba tocar.

Para el sábado, la campaña había recaudado 70.026 $, sobrepasando su objetivo de 70.000$. Dos negocios locales, el Brown’s Volkswagon y el Sugar Shack Donuts,donaron 5.000$ cada uno a la campaña y pretenden regalar todas sus entradas.

“Mejor que esperar y esperar a que nuestra banda favorita nos visite, vamos a hacer que ocurra”, afirmó Goldin. “Vamos a vender entradas para un concierto de Foo Fighters que la banda no tiene programado en sus agendas y esperamos que vengan a tocar. Si la banda acepta, todos rockearemos. Si no vienen, todo el mundo recibirá su dinero de vuelta. Cada céntimo. Así que compra tu ticket, difunde la información, y formemos parte de la historia del rock and roll”.