Ya que el niño no hizo caso, su secuestrador prefirió dejarlo en libertad.
El niño se llama Willie Myrick y se encontraba fuera de su casa en Atlanta, Georgia cuando un auto se estacionó y el chofer lo convenció de acercarse con la promesa de recibir dinero, cuando lo tuvo cerca, lo tomó y a empujones lo metió al vehículo.
Una vez dentro del auto del secuestrador, el niño no dejó de canta el tema “Every Praise”. Después de algunas horas, “El abrió la puerta y me dejó salir (…) me dijo que no le contara a nadie”.
Ya reunidos, el niño y el cantautor de la canción “Every Praise”, cantaron juntos el tema que le salvó la vida a Willie: “realmente creo que Dios hablo a través de mi para salvarle la vida a este joven”, declaró el cantante.
Aunque no lo han capturado, la policía ya cuenta con un retrato hablado del secuestrador.
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