El diferencial de este lugar es que casi todos los platos se elaboran con órganos sexuales, presentados de forma comestible y con nombres interesantes, como "La esencia del Buda de Oro" o "Las flores de jazmín con 1.000 capas". Hay penes de buey cortados en forma de estrellas, gónadas de ovejas servidas sobre una cama de curry, penes de burro cortado en rodajas finas, penes de yak y platos de penes surtidos, entre otros "manjares". Esta comida no es, sin embargo, apta para todo público: hay que tener al menos 15 años para comer en el restaurante (debido a que las hormonas de los alimentos pueden afectar el crecimiento) y las mujeres no pueden comer testículos, ya que sus hormonas pueden modificarles la voz y hacerles crecer barba.
© CARACOL S.A. Todos los derechos reservados.
CARACOL S.A. realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados.