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Porque el desorden también debe ser remunerado!

Laura Moreno

25 mil dólares por ser víctima de bailes de Striptease y películas pornográficas en su lugar de trabajo.

AmBey, un cristiano evangélico, empleado de la compañía Anheuser Busch InBev, productora de cervezas, recibió un pago de 25 mil dólares por ser obligado por su supervisor a ver porno y recibir un striptease, a la vez, mientras trabajaba.

Según el dictamen del máximo tribunal laboral de Brasil, los incidentes con prostitutas ocurrieron al menos en 10 ocasiones en 2003 y 2004 y por esta razón, la unidad brasileña de la compañía Anheuser Busch InBev, deberá pagar la cantidad acordada debido a la vergüenza y acoso que sufrió el empleado.
El fallo determinó que el empleado fue atado en su trabajo y obligado a ver películas pornográficas, mientras que una bailarina le hizo un espectáculo de striptease en la oficina.
En el comunicado publicado por la compañia se describía el perfil del empleado en el cual se destacaba como un cristiano evangélico casado; no obstante, el supervisor en su defensa explicó que utilizaba los servicios de prostitutas como un de incentivo para motivar y premiar a los vendedores que alcanzaban los objetivos de la compañía.
Por el contrario, AmBev declaró que estos casos no reflejan el funcionamiento diario de la empresa y agregó que “transmite el respeto y valora el trabajo en equipo”.