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Un nuevo método anticonceptivo que se pone como un tampón

Laura Moreno

Estudios internacionales registran que 21% de los embarazos no planeados ocurren en mujeres que toman píldoras anticonceptivas, y que 47% de ellas olvidan la toma de una o más píldoras por ciclo. En ésos datos hizo hincapié el doctor David Fusaro a la hora de hablar de las bondades de un nuevo método anticonceptivo.

Durante la presentación del anillo anticonceptivo en la Argentina remarcó que "80% de las mujeres preferirían contar con un método anticonceptivo mensual".

El director del Instituto Ginecológico Buenos Aires sostuvo que el porcentaje de efectividad de este método es de 99,7%, similar a los anticonceptivos orales. 

Fusaro aseguró que "si el anillo está adentro de la vagina, automáticamente libera la sustancia activa y es efectivo, no requiere colocación específica como el diafragma, sólo debe estar en el interior de la vagina".

Del mismo modo -destacó- "no existe riesgo de tener dificultades a la hora de extraerlo, no se adhiere a la vagina y es fácil la extracción".

El anillo flexible ofrece un mes de protección contra un embarazo no deseado, a través de la liberación de hormonas directamente a las paredes de la vagina sin pasar por el tracto gastrointestinal. Esto permite que la dosis de hormona suministrada por el anillo sea más baja que la proporcionada por la pastilla anticonceptiva y significa que los trastornos gastrointestinales no reducen la confiabilidad de este método anticonceptivo.

Con un diámetro de 5,4 centímetros, el anillo es colocado por la mujer en la vagina como si fuera un tampón, con el aditamento de que la posición exacta no es importante para que su uso sea efectivo.

El anillo queda en su lugar durante tres semanas y luego se extrae, para luego, exactamente una semana después, colocar uno nuevo. Durante el descanso de siete días sin anillo, la mayoría de las mujeres experimentan un sangrado.

Lo que el anillo hace es liberar continuamente bajas dosis de las hormonas estrógeno y progestágeno, impidiendo así la ovulación. Además, también hace que el moco del cuello del útero sea más espeso, impidiendo así el paso de los espermatozoides al útero