¡Así se hace gorilita!… Chimpancé no hace más sino mirar porno

Laura Moreno
Comparte:
Gina era una chimpancé que vivía en un zoológico de Sevilla, España. El lugar donde residía contaba con dos secciones: una al aire libre para que pudiera jugar y la otra cerrada con calefacción para que no pasara frío.

Estimulada por los cuidadores para que no tuviera una vida sedentaria, le activaron una televisión y le dieron el control remoto. A los pocos días no paraba de mirar pornografía.

Como los chimpancés tienen una vida interior muy intensa los cuidadores tienen que estimularlos física y psicológicamente a través de hormigueros artificiales, juguetes e inventos que los obligan a estar activos.

Según explica un periodista de El Mundo, decidieron instalar una TV y darle el mando a Gina para que pudiera controlar lo que veía. En cuestión de días no solo había, sola, aprendido a usar el control, sino que siempre elegía el canal XXX.

Exit mobile version