Así es, un bar turístico promete servir alcohol sin pagar un solo peso, pero los turistas deben aceptar un reto bastante peligroso que consta de poner una mano encima de la mesa para que el barman golpee los puntos de referencia con varias herramientas.
Este macabro desafío incluye martillos, cuchillos, hachas y hasta un taladro: