¿Se siente algo? ¿Será miedo, tristeza, alegría? Pues es eso precisamente lo que descubrió un estudio de la Universidad de Carolina del Norte.
Esta universidad gracias a su investigación pudo llegar a identificar ese sentimiento exacto que producen los instantes previos a la muerte.
Kurt Gray, líder del estudio, indicó que «cuando imaginamos nuestras emociones, cuando nos acercamos a la muerte, pensamos principalmente en la tristeza y el terror, pero resulta que morir es menos triste y aterrador -y más feliz- de lo que la gente cree».
El estudio lleva por nombre: «Dying Is Unexpectedly Positive» porque según esto al acercarse la muerte, aparece una sensación «inesperadamente positiva».
Ellos se basaron en escritos de personas que estaban a punto de morir, como por ejemplo personas que estaban condenadas a muerte y en un 100% de los casos eran más los pensamientos positivos que negativos.