
El mensaje que deja este testimonio es que somos víctimas de la indiferencia más que de la maldad, lo único que podría cambiar nuestra suerte es la buena fe de alguna persona, arriesgarse a defender a un desconocido simplemente puede cambiarle la vida. Sin duda alguna, nos pone a pensar si la vida de ésta mujer sería diferente si alguien la hubiera salvado.
Estos videos sirven para reforzar los valores de las personas de ayudar a cualquier persona que pudiera necesitar ayuda.