
Es así que en Rusia, una mujer se encontraba esperando que un auto negro pase para ella cruzar. La mujer camina hacia el otro lado de la pista sin notar que el bus que va en dirección a ella.
Gracias a los buenos reflejos del conductor y los excelentes frenos del bus, la chica sale ilesa y luego le pide disculpas al chofer.