
En el cortometraje se puede ver a una niña que iba feliz cantando en la parte trasera del auto que manejaba su madre. Minutos después, un policía las detiene y le advierte a la madre, que está casi llorando, sobre la luz trasera de su automóvil. Ella se tranquiliza, pero luego el policía le pide su licencia que la madre no tiene. Entonces la mujer es deportada por no tener documentos y es separada para siempre de su hija.