Internet ha permitido ciertas ventajas al mundo no solamente personal sino también laboral pero hay momentos que se convierte en un simple dolor de cabeza.
Cuando alguien tiene un jefe intenso o si su trabajo es vivir pendiente de él/ella así no sea tu hora de trabajo, a veces se vuelve un dolor de cabeza tener que recibir correos electrónicos a cada instante con órdenes y que ni te paguen las horas ‘extras’.
Pero, en Francia se ha convertido en la excepción al haber aprobado una ley que permite a cierto sector de trabajadores ignorar los correos de tipo laboral que reciban después de las 6 de la tarde, incluso si se trata de uno de su jefe inmediato.
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