
La mujer se presentó al examen final que los estudiantes franceses de secundaria deben tomar antes de solicitar la admisión a una universidad.
Pero, el profesor reconoció a la mujer como una impostora. Funcionarios de la escuela notificaron a la policía local y discretamente aguardaron en la sala de espera más de 2 horas que la mujer termine su examen con el fin de no molestar a los otros estudiantes.
Después de haber sido detenida, la mujer reconoció el engaño. Ella dijo que solo intentaba aumentar la puntuación de su hija en la parte de idioma Ingles.