Mujerología: Trucos para un buen noviazgo

Hay muchos tipos de noviazgo, tantos como parejas en el mundo, ya que todos somos diferentes. Pero, sin duda alguna, existen algunos patrones de relaciones de pareja que se cumplen de forma más o menos notoria, por lo que podríamos definir algunos tipos de noviazgo que tal vez todos conozcamos o hayamos vivido en persona.

¿Qué noviazgos puedo llegar a tener?

Cuando comienzas a salir con alguien, te puedes dar cuenta de que la relación es perfecta, o es lo peor del mundo. Cada nueva relación es una puerta abierta a diferentes posibilidades, y cada noviazgo que puedes entablar te enseña nuevas cosas para ser cada vez un mejor novio. Por eso, debes saber algunos parámetros para entender algunos tipos de noviazgo que podemos tener.

Un ejemplo muy claro es el noviazgo dependiente, en el que necesitas a esa persona para que te ayude en todas las decisiones que debes tomar en tu vida. Otra opción negativa es el noviazgo controlador, en el que uno es dominante y el otro sigue las reglas. Si eres el dominado, puede que no te des cuenta hasta pasado un largo período de tiempo. En algunos casos, también se dan noviazgos desesperados, ya que uno -o ambos- han sufrido una pérdida reciente y necesitan alguien que les de amor.

Por otra parte, las relaciones tóxicas son esas que parecen perfectas para quien lo ve de afuera -y puede que no tengan nada de malo en verdad-, pero que tú odias y quieres dejar, te sientes frustrado y enojado y no saber por qué. Y sin duda alguna, dentro de las relaciones desastrosas -bastante común también-, están las relaciones trofeo, esas en las que uno está con el otro para sacar algún tipo de provecho -dinero, o porque es una mujer bonita.

Un tipo de noviazgo que cada vez se ve más es la relación abierta, en la que ambos son novios pero tienen el derecho a tener otras parejas sexuales. Es similar a los amigos con derecho, aunque estos últimos no tienen compromisos emocionales tampoco; y también a los affaire, aunque estos pueden tener un tinte más serio, aunque finalmente acaban siendo solo sexo. En el extremo opuesto están las relaciones asexuales, aquellas en las que, por desinterés o por otros problemas, no se mantienen relaciones sexuales.

Las relaciones con negociaciones también son comunes: si bien ambos están contentos el uno con el otro, viven momentos de estrés en lo que todo parece ir mal y deben hacer un montón de negociaciones para volver a encauzar la relación. Otros llevan a cabo relaciones en las que son felices por el momento, pero no hacen planes a futuro porque saben que las cosas no van a funcionar.

Con Internet, cada vez son más comunes los noviazgos y relaciones a distancia, en los que ambas personas se aman pero el contacto físico es imposible. Es un tipo de relación difícil, ya que se deben saber manejar los celos y las inseguridades, y puede traer muchos problemas.

Tipos de amor

Y para no finalizar este artículo tan rápidamente, me gustaría contarte diferentes tipos de amor que puedes sentir:

– Amor platónico: Ese amor puro y romántico que sientes por alguien que sabes que nunca va a estar contigo. Suele darse en personas de corta edad.
– Amor fugaz: Es aquel que sientes por alguien que te cruzas en un medio de transporte, por la calle o un compañero de trabajo. Gente que te atrae, pero que nunca tendrías una relación con ellos.
– Amor no correspondido: Este es simple y claro.
– Amores obsesivos: Son de aquellas personas que suelen ser rechazadas a menudo o tienen novio por primera vez y toda su vida gira en torno a él.
– Amor egoísta: Aquel en el que una de las personas de la relación solo se preocupa por su propio bienestar.
– Amor incondicional: Tampoco hace falta explicarlo.