Según parece, el padre, Guy Blackburn de 54 años, había fallecido en su domicilio por causas naturales en noviembre de 2010. De no ser por los vecinos, nadie sabe cuánto tiempo habría mantenido el cuerpo sin vida dentro de la casa. En marzo, y al no ver al hombre desde octubre, los vecinos dieron la voz de alerta.
La policía dio con el cadáver en la habitación principal al visitar la casa tras una pista. Ante las evidencias, el hijo finalmente ha optado por admitir lo ocurrido, así como el robo de cerca de 2.000 libras de ingresos al fallecido entre marzo y noviembre.
Ahora, Christopher Blackburn podría enfrentarse a una pena de cárcel, aunque habrá que esperar hasta marzo para conocer la sentencia.