
Callier inició su carrera artística en 1962 con el sonido llamado doo-wop, después de abandonar este, llegaron sus álbumes más importantes en los años 70: “Occasional Rain” (1972), “What Color Is Love” (1973) y “I Just Can’t Help Myself” (1974), híbridos entre el funk, el soul y el jazz.
Callier colaboró con Beth Orton y Massive Attack, abandonó la música para estudiar programación y sociología en los años 80, pero se convirtió en un artista de culto para la escena del acid jazz británico.
Descanse en paz Terry Callier.