El joven fue a comprar cerveza, pero los dueños de la tienda se negaron a vendérsela porque pensaron que su identificación era falsa y que era menor de edad. El caso terminó en altercado, harto de que siempre le pase lo mismo, el joven se enfadó y empezó a gritar a los trabajadores de la tienda.
Finalmente fue arrestado por alteración del orden público y pasó dos días en la cárcel, además deberá pagar una multa y está a la espera del juicio.
Sanders dijo que esta frustrado porque la gente siempre piensa que es un adolescente. "Me siento acosado por todas partes voy. Estoy acostumbrado a ella, pero a veces me canso de esta situación", dijo Sanders.