Una estudiante de la Universidad Iberoamericana (UI) inventó un "económico ataúd ecológico" que evita la contaminación del suelo y reduce los costos funerarios.
El ataúd ecológico se podrá quemar junto con el cuerpo si la familia opta por incinerar al muerto. Y si se deposita el cuerpo en una fosa sencilla, sin cemento, el ataúd se desintegra en unos cuantos meses, explicó la fuente.
Ante esta situación, Karina Sandoval se dio a la tarea de inventar este ataúd que además de ser económico los materiales de los que está hecho no dañan la tierra, dijo Víctor Reynoso Bonilla, coordinador de proyectos estudiantiles que ayuden a resolver algunos problemas del país.