El representante político conservador afirma que está probado que los teléfonos móviles se utilizan a menudo para tomar fotos de menores en situaciones comprometidas.
Si se aprueba la ley, los fabricantes tendrían que añadir un tono que se oiga claramente a cierta distancia cuando el propietario del móvil pulsa el botón para tomar una fotografía.
El móvil debería impedir además la posibilidad de eliminar o silenciar ese sonido, según esta legislación.