En esta ocasión la tecnología sirvió de nada, ya que algunos asistentes a una sala de juegos de realidad virtual presenciaron un ataque epiléptico de uno de los integrantes del juego.
El jugador identificado con el seudónimo de DrunkenUnicyclist, con el avatar de un robot rojo, se le pudo ver tirado en el suelo, convulsionando y con un poco más de detalle se podía escuchar su respiración rápida e intermitente.
Los presentes en la sala de chat como, se puede evidenciar en el vídeo, se agolpan junto al cuerpo como en una situación real como pasaría en plena calle, pero esta vez en la red.
Después de unos momentos la situación en la sala se tranquiliza luego de que el jugador dice sentirse bien mientras el robot de color rojo sigue en el suelo.
Lo increíble de la situación fue que ninguno de los jugadores tenía idea de cómo era su verdadero nombre o si quiera en qué lugar del mundo vivía el jugador teniendo decenas de ojos en la pantalla pero ninguno sin poder auxiliarlo.
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