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Amor / chocolate = mecanismo químico

Laura Moreno

El amor pasional y el deseo irrefrenable de comer chocolate son sólo un mecanismo químico específico del cerebro, según investigaciones presentadas el viernes en Chicago (norte de EEUU).

"El amor romántico no proviene del corazón. Proviene del motor cerebral, la parte del cerebro donde nace el deseo, como el de comer chocolate, que es un deseo irrefrenable", explicó Helen Fisher, profesora de antropología en la Universidad Rutger (Nueva Jersey, EEUU).

En los enamorados, "una parte de su cerebro se activa como si estuviera bajo los efectos de la cocaína", añadió y, según ella, el amor romántico sería un deseo de una intensidad mayor que el puro deseo sexual.

Esta antropóloga explicó que tres sistemas cerebrales relacionados: El primero, es el deseo sexual alimentado por la testosterona, tanto en hombres como en mujeres. El segundo regula el amor pasional u obsesivo y parece estar vinculado a una actividad elevada de la dopamina, un estimulante natural. El tercero, que controla el apego y permite a una pareja permanecer unida suficiente tiempo como para criar hijos.